Restos del padre Silvano ya descansan  en la Parroquia de Cardona como él lo había pedido

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Obispo Collazzi: “Fue un hombre de confianza y consejo”

Los restos del padre Silvano Berlanda descansan desde este martes al pie de la cruz que se encuentra en la Parroquia “Nuestra Señora de Luján y Santa Isabel de Hungría”, cumpliéndose así con un pedido expreso que el párroco había solicitado previo a su fallecimiento (2018) al Obispo Diocesano Carlos María Collazzi.

El traslado de los restos desde la necrópolis local hacia la Parroquia y su descanso final en ésta, se celebró a través de una misa presidida por el Obispo Collazzi, de la cual participaron varios sacerdotes, diáconos y el sobrino del padre Silvano, llegado desde Italia, el también sacerdote Sergio Gamberoni. La parroquia lució repleta de files, no solo de Cardona, sino también de otras localidades de la Diócesis de Mercedes.

Al referirse al papel de Berlanda en la iglesia uruguaya, pero sobre todo en Cardona, Collazzi dijo que expresaba con su acción “la alegría de ser cura. Ordenado en una Iglesia en reforma, la Catedral de Salto, comenzó un camino de construcción y lo fue haciendo a lo largo del tiempo, construyó no solo edificios, que los podemos ver reflejados en tantas capillas o centro pastorales”, sino también en la integración en los barrios “de personas en torno a la palabra de Dios”.  

“Silvano era una apasionado de que en cada barrio hubiera una capilla” y no era para que en esos lugares se celebrara misa, “sino porque quería que en cada lugar existieran grupos que se reunieran en torno a la palabra de Dios”, recordó.

“En ese responderle al Señor su figura se fue agigantando, que nos llevan a la alabanza, agradeciendo al Señor” por ello, destacó Collazzi.

Pero Silvano también atendió a todo quien golpeó la puerta de la Parroquia. En ese sentido el Obispo mencionó haber recibido  en estos días, una referencia de un cardonense que actualmente está en Costa Rica, reflejando lo que fue el párroco en ese sentido. “Hace años atrás el Padre Silvano me ayudó económicamente y hoy soy lo que soy, dígalo, el Padre Silvano me entregó ese día $ 770, pronto iré por Cardona para devolvérselo a la Parroquia”, contó el cardonense en el exterior al momento de comunicarse con el titular de la Diócesis.  

“Ustedes son testigos que esa fue una realidad muy común aquí en Cardona, alguien necesitaba algo, a golpear la puerta de la Parroquia y a golpear las puertas de su corazón”, precisó.

Destacó además que “sembró la Parroquia de policlínicas preocupado por la salud de la gente”. Y todo eso lo hizo “calladito”. “Si, se lo veía, pero calladito, no para vanagloriarse. Eso lo hizo un hombre de confianza y de consejo, siempre con la palabra justa”.

“Hoy estamos aquí porque es una invitación de él. En la cláusula de su testamento dejó escrito que en la medida de lo posible, a penas se cumplieran las disposiciones municipales, sus restos estuvieran aquí en Cardona, a  los pies de la cruz”, mencionó.  

Collazzi expresó finalmente que Silvano termina diciendo en su testamento: “seguiré rezando por ustedes”.