Niños y Educadoras del Centro Caif “Mi Casita” de Florencio Sánchez han venido trabajando desde hace aproximadamente un mes en un proyecto educativo, unidad de trabajo que tuvo como objetivo principal acercar a los pequeños conocimientos sobre “Las emociones”. Dicha iniciativa fue encarada por los pequeños de 2 años de la Sala Verde, a cargo de la Educadora Ana Machado, como también de la Sala Naranja, niños de 3 años a cargo de la Educadora Leticia Bitencourt.
Como punto final de esta propuesta, fue desarrollada este jueves una exposición en el patio exterior de “Mi Casita”, con el resultado del trabajo realizado, siendo apreciada por niños y padres que recorrieron la misma en familia, reconociendo sus propios dibujos, afiches o juegos que desarrollaron en el transcurso del proyecto.
Conociendo las emociones
Ana Machado en diálogo con Centenario explicó que la propuesta apuntó a mostrarle a los niños las diferentes emociones, que ellos las pueden experimentar, “hablamos mucho con ellos sobre sus miedos, sobre lo que es la alegría, el amor, la tristeza o el llanto, el enojo, la calma, entre otras”. Para llevar adelante el proyecto trabajamos basados en un cuento llamado “El monstruo de colores”, “donde se menciona que todas las emociones juntas no se pueden expresar, sí separadas, según el momento que cada uno esté atravesando”. Cabe indicar que los colores en este trabajo expresan una emoción, el verde la calma, el azul la tristeza, el amarillo la alegría, el rosado el amor, el negro es el miedo, el rojo el enojo.
Agregó que para terminar se compartió con los padres una exposición, donde aparecen los monstruos de colores, que son los que aparecen en el libro utilizado para trabajar, como también se colocaron fotos de las diferentes actividades realizadas en ambas Salas, además de los niños más grandes realizar dibujos en los cuales representaron como se sentían. “Además trabajamos con juegos, de la memoria, como también otro en el que se utilizan caras con diferentes emociones, que van cambiando según los sentimientos”. Ana aseguró que los niños disfrutaron mucho del proyecto, incorporaron muy bien el cuento de la emociones, compartiendo nuevas experiencias con “El monstruo de colores”.